Torta de miel - gracias a Yuls

Bueno, esta es una receta judía. La verdad, la hice un Jueves Santo. Nunca me caractericé por cocinar fideos el domingo, ñoquis el 29 ni pan dulce en Navidad. Hago las cosas cuando me dan ganas, cuando consigo un producto determinado, cuando me sobra algo, y así. La cuestión es que mi amiga Julia me pasó esta receta a sabiendas de que estaba craneando este blog, y me pareció linda receta para estrenarlo. No me copo mucho con las cosas dulces, pero hay cosas que me encantan: las manzanas y las bananas, el dulce de leche, el caramelo, el chocolate y... la miel.¡Salió taaaaaan rica! A decir verdad, la interpreté, porque, como la mayoría de las veces, la gente te da la lista de ingredientes y bueno, arreglátelas y, además, no siempre tengo o consigo todo lo que lleva una receta. Acá va lo que hice:
1) Batí 2 huevos con media taza de aceite y media taza de azúcar.
2) Agregué media taza de café (lo hice fuerte) y 200 gr de miel.
3) Después mezclé 4 cucharaditas de bicarbonato (siempre hay que tener eso a mano, sirve también para limpiar, por ejemplo) con un poquitito de agua tibia y lo agregué a lo demás. Se arma una espuma que se ve que le da mucho power a la torta porque salió bien esponjosa.
4) Tamicé medio kilo de harina leudante encima de toda la mezcla.
5) Y ahora viene la parte del cotillón: le agregué una manzana en daditos, más o menos 200 gramos de dulce de membrillo también en daditos y unas pasas que tenía (un poco, no sé, lo que había)
6) Julia me recomendó que la cocine en un savarín. El único que tengo es el de la Essen, así que allí lo cocine, unos 40 minutos. La verdad, no sé. A los 20 minutos, ya se puede "espiar", así que me fui fijando. La original lleva también nueces. No las conseguí a un precio razonable así que las descarté. Pero, como ya dije, no soy una fundamentalista, así que la hice igual.

Tuvieron el tupé: algunos de los chicos de ProCreAr, Ceci, Ariel, mis suegros y yo.